Las 5 tipografías más recomendadas para trabajos académicos

El tipo de tipografía que utilices para entregar un trabajo académico es fundamental para proyectar una imagen de profesionalismo y compromiso. Afortunadamente, existen todo tipo de tipografía en Word que te ayudarán a causar una buena impresión y que sin duda te permitirán sumar puntos positivos con la persona que lea tu trabajo.

Aunque en Word puedes encontrar una amplia cantidad de opciones con respecto a la tipografía y fuentes para descargar, solo unas copas son las recomendables para trabajos académicos. En este artículo te contamos cuáles son las mejores tipografías para trabajos formales. Así que, no dejes de leer hasta el final para descubrirlo.

1. Garamond

Esta es una de las fuentes para descargar más populares cuando hablamos de tipografías para trabajos académicos. Ella no solamente le da un estilo más profesional a tus escritos, sino que además le aporta estética: hará que tu trabajo luzca más refinado.

Otra de las ventajas de esta tipografía recomendada es que, debido al espaciado que existe entre cada letra y cada palabra, te permite agregar más información en una sola página sin que esto implique comprometer la legibilidad del texto. Por eso, vale la pena utilizar esta tipografía para tus trabajos académicos.

2. Cambria

Se trata de una fuente serif que se encuentra dentro del paquete de tipografía Word conocido como “ClearType Font Collection”, donde también se incluyen fuentes como Calibri, Corbel, Consolas y Cadara. Dicho paquete tipográfico se encuentra en Word y en la mayoría de los programas de Microsoft Office, ya que fueron diseñados específicamente para facilitar la lectura de un documento frente a la pantalla.

Cambria es una tipografía para trabajos altamente recomendada, hasta el punto en que muchos la consideran como “la nueva y moderna Times New Roman”. Esta tipografía no solamente es perfecta para leer trabajos en frente de una pantalla, sino que también es adecuada para las impresiones. Por eso, Cambria es una tipografía recomendada tanto para trabajos impresos como en línea.

3. Gill Sans

Si pudiéramos resumir esta tipografía Word en dos palabras sin duda serían “sofisticada y simple”. Se trata de una tipografía para trabajos que pertenece a la categoría de sans serif, y le aporta al texto un toque único de modernismo y elegancia.

Esta tipografía fue desarrollada alrededor de los años 20, en Inglaterra. Por eso, se trata de una fuente para descargar muy usada en Reino Unido, incluso por sitios como la BBC.

Finalmente, vale la pena resaltar que este tipo de fuente se encuentra distribuida en prácticamente todos los equipos Mac OS X y en varios programas de Microsoft. En este último la puedes encontrar bajo el nombre de Gill Sans MT.

4. Calibri

Si estás buscando una tipografía Word por excelencia, sin duda alguna Calibri encabezaría la lista. De hecho, desde el año 2007 esta tipografía recomendada se encuentra como la fuente predeterminada de este programa de Office.

A pesar de que la tipografía Calibri no se utiliza tanto como la Arial (una fuente que sin duda no debes usar para tus trabajos), es un hecho que su popularidad va en aumento. Y es que no solamente proyecta profesionalismo, sino que también te ayudará para que tu trabajo académico luzca mucho más atractivo y sea fácil de leer.

5. Lato

A pesar de que esta tipografía Word fue diseñada específicamente para usos empresariales, en los últimos años ha ganado popularidad como tipografía para trabajos académicos. Se trata de una fuente sans serif elaborada con el objetivo de proyectar neutralidad, pero cuenta con algunas características y rasgos resaltantes que también hacen que el texto sea más fácil de leer.

Existe una amplia variedad de estilos y grosores con respecto a la tipografía, y todos ellos le aportarán a tu trabajo un toque único de profesionalismo. Aunque no está disponible por defecto en Word, puedes descargarla fácilmente en la web y hacer uso de ella siempre que así lo requieras.

Conclusión

La tipografía es un factor fundamental para lograr que cualquier trabajo académico proyecte cierto nivel profesional.

Por eso, es fundamental que elijas una fuente que vaya acorde a tus necesidades particulares y te permitan presentarle tu trabajo al lector de la mejor manera posible. Si a esto le sumas la elaboración de un trabajo de alta calidad, y usas un formato de citación recomendado, sin duda alguna el éxito está más que garantizado.